La nueva generación no es feliz a
pesar de lograr todo lo que quiere
Simon Sinek es un famoso orador motivacional inglés de 43 años, especializado en temas de liderazgo. Su vasta experiencia le ha permitido observar algunos fenómenos sociales que están impactando la manera en que las personas se desempeñan en las empresas.
Esto, según el sitio biobiochile.cl publicado a principios de este año, sobre las especificaciones del experto en un vídeo, que data de setiembre de 2016, de un programa de TV que comenzó a tomar fuerza y a viralizarse rápidamente a través de RRSS (redes sociales).
En el video el conferencista es consultado por el conductor sobre la actual generación -conocida como “millennials”– dominada por los llamados “nativos digitales”.
El experto alega que estos nativos digitales son difíciles de manejar, que se les acusa de creerse con derechos por sobre todo, que son narcisistas, egoístas, sin foco, perezosos y que confunden el liderazgo.
De hecho, dijo, que cuando se les pregunta qué quieren encontrar en una empresa, estos responden que un lugar con propósito, donde generar «impacto» gesteando una risa como diciendo ni saben lo que es, además de comidas gratis y puff, y que a pesar de lograr todo esto, todavía no son felices.
A lo que Sinek explica que a los jóvenes de hoy “una vez les dijeron que podían tenerlo todo en la vida, sólo con desearlo”, pero que cuando llegan al “mundo real”, que es el laboral, se dan cuenta que no es así y que “su mamá no les puede conseguir el ascenso”.
Su autoestima cae porque nadie les está diciendo todo el tiempo lo buenos que son como lo era antes en casa. Agrega que uno de los problemas de los miembros de esta generación es que aunque tengan todo lo que quieran, nunca son felices.
CAUSAS; crianza, tecnología, impaciencia y ambiente
Como las causas de estas interrogantes, alegó que se debe a 4 factores, uno de ellos es la crianza; que crecieron escuchando que podían tener todo lo que quisieran solo por quererlo.
Otro factor fundamental para el es la tecnología; a la que categorizó como adictiva por que los aparatos móviles generan dopamina o la sensación de felicidad cuando le dan un like a una foto o cuando suman más seguidores, por lo que acuden a los aparatos y redes sociales que les brinda alivio temporal al estrés o depresión que atraviesan.
«Si te levantas y ves el celular antes de decir buenos días a tu novia o esposa, eres un adicto y como toda adicción con el tiempo destruirá», dijo.
Por eso, argumenta que eta generación crece con baja autoestima, sin mecanismos de supervivencia para lidiar con el estrés.
Si a esto se le suma la impaciencia como tercer factor; por que crecieron en un mundo de recompensa instantánea, que no experimentan en la satisfacción laboral o en la fortaleza en las relaciones, para lo cual, no existe un app, bromeó.
«Lo que tiene que aprender esta generación es a tener paciencia y que las cosas que de verdad importan son el amor, alegría, éxito laboral, autoestima y que el viaje completo es arduo y duro», amplió
Y un cuarto punto que se refirió al ambiente laboral en donde se destina a esta generación, ambientes corporativos donde importan más las ganancias a corto plazo que las vidas a largo plazo de estos jóvenes y que el problema no son ellos, sino ese espacio corporativo con falta de liderazgo en el mundo de hoy.
Entre alguna de las recomendaciones para los líderes en las relaciones humanas dijo que se deben crear mecanismos que permitan generar más pequeñas interacciones face to face o un contacto más directo, reuniones o encuentros sin celulares, puntualizó.